Renault fabricará en Sevilla dos modelos de cajas de cambio para sus vehículos híbridos
Renault fabricará cinco nuevos modelos de vehículos híbridos en sus factorías en España, tres de ellos en Palencia y dos en Valladolid, en el marco del plan industrial que generará 12.000 millones de euros de valor y permitirá formalizar 1.000 contratos indefinidos hasta 2024. El plan incluye también que la planta de Sevilla sea la responsable de la construcción de dos cajas de cambio para estos modelos con motores híbridos.
En un acto presidido por Felipe VI y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el CEO del grupo Renault, Luca de Meo, ha anunciado que las fábricas españolas de la marca se pondrán al máximo rendimiento con el Plan Industrial 2021-2024 (Renaulution), que incluye además un proyecto de Economía Circular para Sevilla.
Al acto ha asistido el presidente de la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, Jean-Dominique Senard.
«Esto va a convertir a España en nuestro polo de electrificación e hibridación», ha dicho Luca de Meo sobre un plan «muy ambicioso» que implicará en concreto para Palencia -ha dicho- la adjudicación de tres nuevos vehículos de los segmentos C y D SUV, que llegarán de forma escalonada en 2022, 2023 y 2024.
Además, la Factoría de Carrocería y Montaje de Valladolid fabricará los segmentos B SUV y B+ SUV desde 2024, y también se destinará una nueva familia de motores a la Factoría de Motores de Valladolid que llegarán en 2023 y dos nuevas cajas de velocidades a la Factoría de Sevilla para 2022 y 2024.
La factoría andaluza desarrollará por otro lado un proyecto para reciclar vehículos usados, en el marco del objetivo de Renault de que la huella de carbono sea cero.
«Este plan refuerza a España como la segunda Casa de Renault», ha defendido el CEO del grupo, que, al igual que el director en España, José Vicente de los Mozos, ha agradecido a los representantes de los trabajadores la altura de miras que les ha permitido aprobar este plan. «Han sabido entender que esta apuesta significaba futuro», ha dicho Luca de Meo.
El objetivo de este plan denominado Renaultution es cambiar totalmente el modelo de negocio de la compañía para basarlo en la rentabilidad y no en el volumen de ventas como vía para afrontar la complicada situación causada por la pandemia.
En Valladolid, Renault quiere consolidar su centro de I+D+i, cuyos ingenieros trabajarán en la electrificación, la conectividad, las baterías, el hidrógeno y los servicios de movilidad.
La apuesta por la hibridación es, para esta firma, un excelente camino hacia la descarbonización que además le permitirá producir vehículos de alta demanda.
Renault cuenta con cuatro fábricas en territorio español que producen vehículos y órganos mecánicos y, según indica la compañía, supone un 1,5 % del PIB del país y representa un 5 % de la exportación.
Apoyo de la Junta
El consejero de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades de la Junta de Andalucía, Rogelio Velasco, ha celebrado el anuncio de Renault de este mismo martes de garantizar nuevos proyectos en su factoría de Sevilla, concretamente dos nuevas cajas de velocidades para 2022 y 2024, y el proyecto de economía circular que estaba en estudio por parte de la compañía.
Se trata de unos planes estratégicos que, según señala el consejero en un comunicado, ponen de manifiesto que «Andalucía seguirá siendo una pieza clave en el futuro de la compañía».
Durante la presentación en Palencia del plan de inversiones del fabricante francés de automóviles para los próximos años en las plantas que posee en España (Valladolid, Palencia y Sevilla), remarca que se trata de una «muy buena noticia para la industria andaluza, un sector considerado esencial para recuperar la actividad económica de la región y reforzar su competitividad».
Velasco reconoce la importancia de la actividad industrial de Renault, al tiempo que hace hincapié en el impulso que supondrá el plan industrial de la multinacional para el sector automovilístico de la región, dada su condición de empresa tractora, «generadora de empleo cualificado y con una enorme potencialidad para su diversificación hacia una producción tendente a la descarbonización».
En ese contexto, pone de manifiesto el potencial innovador de la comunidad en el desarrollo de la nueva movilidad sostenible y conectada, «uno de los retos de futuro que ha de afrontar la industria de la automoción».
Precisamente, para el titular de Transformación Económica las instalaciones de Sevilla están llamadas a liderar dicho reto con la fabricación de nuevas cajas de velocidades y con un proyecto que permitirá reacondicionar los vehículos usados para darles una nueva vida. «Todas estas iniciativas representarán una mayor carga de trabajo para la factoría de Sevilla, que demuestra así su competitividad frente a otras plantas en el mundo», añade.
Por otro lado, Velasco dice que Andalucía «sigue siendo un destino idóneo para la atracción de inversiones que impulsen el desarrollo económico y el empleo». A su juicio, «es una tierra que posee talento, infraestructuras estratégicas, recursos humanos cualificados y una normativa muy proclive a la implantación de nuevos proyectos empresariales, tras la ambiciosa reforma de simplificación acometida en el marco regulador de la actividad económica».
La factoría de Sevilla, cuyo origen se remonta a 1958, produce cajas de velocidades de automóviles manuales de cinco y seis velocidades, así como robotizadas. Con una experiencia de más de 50 años, tiene instalada una capacidad de fabricación de 31.000 unidades/semana, produce más de un millón de unidades al año y cubre el 30% de las necesidades del Grupo Renault a nivel mundial (Renault, Dacia, Nissan) así como a otros clientes (Mercedes Daimler).
Esta planta cuenta con un alto nivel tecnológico y en 2017 fue considerada líder mundial en competitividad en la fabricación de cajas de velocidad. Sus instalaciones dan empleo a más de 1.000 persona.
Sevilla es sede del único centro de I+D+i de cajas de velocidades en España, con capacidades para desarrollar actividades de concepción, definición de especificaciones, simulaciones de proceso y de comportamiento, instalación de líneas de fabricación y sistemas industriales asociados al más alto nivel tecnológico. También para la obtención de prototipos, optimización y realización de ensayos de validación llegando hasta la industrialización y automatización de los procesos de fabricación en serie.